Los Goya, sin red (leer artículo aquí)
«La ceremonia de los Premios Goya ni se inmuta: se “baja”o se “descarga” a sí misma cada año como si se hubiera mantenido en un recipiente digital “al vacío”»
Día 15/02/2011
Y tal es la sensación de grupo asediado que provocan tradicionalmente en las fechas coincidentes con estos premios, que no es difícil ver a todos nuestros grandes nombres del cine durante la velada como algo homogéneo, autómata, movido por la misma palanca y hacia el mismo objetivo o lugar. Y si tiene uno ganas de fantasear puede considerar que en vez de una ceremonia, lo que está viendo es una sesión; una sesión, por ejemplo, de un grupo de autoayuda o, mejor aún, una reunión de Alcohólicos Anónimos, a la que se acude (y lo digo por lo visto en las películas o leído en algún libro como ese estupendo titulado «Vino torcido») con un problemón, un idea fija, un protocolo y un objetivo común y en las que uno se dirige a los demás, les cuenta sus tensiones, sus esfuerzos y luego, entre lágrimas, agradece la dedicación y el trabajo que hacen por él un montón de personas cercanas y queridas… Que pase el siguiente…
No hay comentarios:
Publicar un comentario